domingo, 21 de octubre de 2012

Coplas por la muerte de su padre. Jorge Manrique


I
 
Recuerde el alma dormida,
avive el seso y despierte
contemplando
cómo se pasa la vida,
cómo se viene la muerte
tan callando,
cuán presto se va el placer,
cómo, después de acordado,
da dolor;
cómo, a nuestro parecer,
cualquiera tiempo pasado
fue mejor.


 II
 
Pues si vemos lo presente
cómo en un punto se es ido
y acabado,
si juzgamos sabiamente,
daremos lo no venido
por pasado.
No se engañe nadie, no,
pensando que ha de durar
lo que espera,
más que duró lo que vio
porque todo ha de pasar
por tal manera.
 
 
III

Nuestras vidas son los ríos
que van a dar en la mar,
que es el morir;
allí van los señoríos
derechos a se acabar
y consumir;
allí los ríos caudales
allí los otros medianos
y más chicos,
y llegados, son iguales
los que viven por sus manos
y los ricos.

martes, 16 de octubre de 2012

Fray Luis de León. Noche serena.

ODA VIII - NOCHE SERENA 

 Cuando contemplo el cielo de innumerables luces adornado, 
y miro hacia el suelo de noche rodeado, 
en sueño y en olvido sepultado, 
 el amor y la pena despiertan en mi pecho un ansia ardiente; 
despiden larga vena los ojos hechos fuente...
...
El hombre está entregado al sueño, 
de su suerte no cuidando; 
y, con paso callado, el cielo, 
vueltas dando, las horas del vivir le va hurtando. 
¡Oh, despertad, mortales! 
Mirad con atención en vuestro daño. 
Las almas inmortales, hechas a bien tamaño, 
¿podrán vivir de sombra y de engaño? 
...
 la luna cómo mueve la plateada rueda, 
y va en pos della la luz do el saber llueve, 
y la graciosa estrella de amor la sigue reluciente y bella; 
...

 Aquí vive el contento, 
aquí reina la paz; 
aquí, asentado en rico y alto asiento, 
está el Amor sagrado, 
de glorias y deleites rodeado. 
 ...
 (Poema dedicado a esa amiga que compartió sus noches conmigo)

Garcilaso de la Vega y la mitología

Áspero mundo. Ángel González

 
Muerte en el olvido

Yo sé que existo
porque tu me imaginas.
Soy alto porque tu me crees
alto, y limpio porque tú me miras
con buenos ojos,
con mirada limpia.
Tu pensamiento me hace
inteligente, y en tu sencilla
ternura, yo soy también sencillo
y bondadoso.
Pero si tú me olvidas
quedaré muerto sin que nadie
lo sepa. Verán viva
mi carne, pero será otro hombre
-oscuro, torpe, malo- el que la habita...